
Desde Trenes Argentinos anunciaron la implementación de un nuevo sistema de frenos en los trenes San Martín, Sarmiento y Mitre. Se trata del sistema automático ATS.
El nuevo sistema de frenos lleva el nombre de Automatic Train Stop y tiene por objetivo incrementar los niveles de seguridad en la circulación de los trenes.
Cabe destacar que a través de un DNU dedeclaró la emergencia ferroviaria, por lo que Estado Nacional busca extremar las medidas para incrementar la seguridad operacional en los trenes a través de la renovación de la infraestructura.
Entre las acciones, además de la implementación de este sistema de frenos, también se reemplazaron todas las balizas que habían sido vandalizadas y fueron restablecidas las señales que habían quedado inutilizadas por el robo de cables y la puesta a punto de la confiabilidad del sistema.
En el caso de la línea Mitre, el ATS comenzó a funcionar desde este lunes, en los ramales José León Suárez y Bartolomé Mitre. En una segunda instancia, se pondrá en funcionamiento en el ramal Retiro-Tigre.
En el caso de la la línea Sarmiento se implementó el sistema en esta etapa en el tramo Once-Villa Luro. Mientras que, en la línea San Martín, el cual se estima volverá a retiro para mediados de julio, comenzó el funcionamiento en toda la traza.
Antes de comenzar a utilizar este sistema, fue necesario finalizar la instalación de los dispositivos en los tendidos de vía.
Cabe destacar que en los cinco ramales eléctricos de la línea Roca, el Tren de la Costa y el ramal Sáenz-González Catán del Belgrano Sur el sistema ya funciona en su totalidad.

Dicho sistema ATS consta de dos componentes:
- Un equipo en tierra (balizas y cajas de control vinculadas al señalamiento)
- Un equipo embarcado por cada formación, que recibe información y actúa de acuerdo al estado de las señales y con control de velocidad.
Su importancia radica en que ayuda a la conducción, que detiene los trenes cuando se presentan dos situaciones anómalas en su circulación.
Por un lado, si una formación traspone una señal que se encuentra a peligro, es decir cuando no tiene habilitada la autoridad de movimiento; y por el otro, cuando el tren excede la velocidad permitida y predeterminada en algún tramo del tendido.
En cualquiera de estos casos se logra mitigar el riesgo de colisión entre trenes que circulan por la misma vía.
