Elecciones 2019: Vidal 2015 en el conurbano. La pelea más potente es en el conurbano bonaerense. Más allá, hay pocos municipios con un caudal de votos importantes.
Elecciones 2019: Vidal 2015 en el conurbano. Y en 2015, María Eugenia Vidal enfrentó al candidato del Frente para la Victoria, Aníbal Fernández, y logró lo que nadie esperaba: ganar.
Luego de 27 años de dominio peronista en la Provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal se hizo de la gobernación y ahora por su reelección.
La pregunta es dónde ganó y dónde perdió la gobernadora Vidal en 2015. Esto nos puede dar un patrón para las próximas elecciones.
Para empezar, hay datos interesantes que resumimos en este cuadro. Son los datos oficiales de la Cámara Nacional Electoral. Qué dicen?
Vidal sacó en San Isidro el 60,67% de los votos mientras que Aníbal Fernández obtuvo el 18%.
En Vicente López, Vidal sacó el 60,15% y Aníbal Fernández el 18,43%.
En La Plata, Vidal cosechó el 46,1% de los votos, y Aníbal Fernández el 28,88%.
Y en Morón, la ahora gobernadora trepó al 45,62% de los votos contra el 29,52% de Aníbal Fernández.
Para establecer un patrón, acá tenemos cuatro municipios «muy amigables» para la entonces candidata y ahora gobernadora María Eugenia Vidal.
Pero en 2015, también presentaron candidatos a gobernador el Frente Renovador (Sergio Massa), la Alianza Progresistas (Margarita Stolbizer) y el FIT.
En estas elecciones 2019, volverán a chocar Cambiemos y el Frente Todos con el Frente Renovador dentro.
Claro que no hay datos fácticos para realizar una sumatoria. Por otro lado, una sumatoria de fuerzas políticas y votos es un atentado a la ciencia política.
Pero hagamoslo de todas formas para tener una aproximación.
Si en San Isidro, Vidal sacó el 60,67% y Aníbal Fernández el 18,43%, ahora, con el Frente Renovador dentro, deberían agregarse al Frente Todos, 14,44 puntos más del massismo.
Entonces la cuenta es otra. Si en San Isidro, Vidal repite el 60,67% de los votos, el Frente Todos representado por Axel Kicillof que sumó al Frente Renovador, se tendría que ir a 32,83%.
Esta es la fórmula para aplicar en cada distrito. Claro que la fórmula falla justamente por su carácter algebraico.
También, porque las fuerzas políticas fueron mutando y también la cantidad de electores de cada una. El Frente Renovador, que en 2013 ganó la Provincia de Buenos Aires, en 2015 obtuvo la mitad de los votos y en 2017 un cuarto. Se cayó por mitades. El caudal electoral es diferente.
Este es uno de los motivo por el cual las elecciones no son comparables. Pero este tipo de análisis indican patrones, generan tendencias para pensar cuál puede ser el resultado.
Si aplicamos el mismo razonamiento que utilizamos para San Isidro en Morón, Hurlingham e Ituzaingó, las diferencia entre oficialismo y oposición varían.
Elecciones 2019: Vidal 2015 – Morón, Hurlingham e Ituzaingó
En Morón, Vidal trepó al 45,62% de los votos contra el 29,52% de Aníbal Fernández. Si le sumamos el 17,26% que el Frente Renovador obtuvo en las elecciones 2015, el número da 46,78% para el Frente Todos que propone a Axel Kicillof.
Claro que hay una contradicción. El patrón es que el Frente Renovador se cae por mitades. Eso fue lo que ocurrió entre 2013 y 2017. Por lo tanto, en 2019 uno debe suponer que va a reunir la mitad de los votos que obtuvo en 2017. Ese número no es el 17,26% del 2015. Es la mitad de la mitad. O sea que hoy el FR suma menos de 5 puntos a la boleta de Kicillof.
Con este dato, suponiendo que Vidal repita la elección en el distrito, Kicillof en Morón saca 34,52%.
Dicho así suena a poco, y es cierto. Primero, Vidal soporta la mochila del Plan Económico del Presidente Mauricio Macri que tiene un 70% de desaprobación. Eso le resta puntos a todos los candidatos de Cambiemos.
Por otro lado, en 2015 parte del electorado del FR Morón migró a Cambiemos. Y en 2017, migró a Cambiemos y al PJ.
Pero para sumar al PJ no hay datos fácticos. Supongamos entonces que el PJ le agrega tres puntos al Frente Todos. Y espejemos el análisis, que Cambiemos los pierde. Entonces Vidal saca en Morón 42,62% y Kicillof el 37,52%.
Vamos a ver el caso Ituzaingó.
En 2015, Vidal sacó el 38,54%. Y Aníbal Fernández, el 33,42%. La diferencia fue de 5,12 puntos. Y en esa elección, el Frente Renovador obtuvo el 20,15% de los votos.
Si ahora hacemos la mitad de la mitad, el FR le suma 5.03%. O sea que en Ituzaingó, bajo este razonamiento, oficialismo y oposición empatan.
Si a su vez, producto de la gestión económica nacional, le sacamos tres puntos a uno y se los sumamos tres puntos al candidato opositor, en Ituzaingó, María Eugenia Vidal obtendrá el 35,54% y Kicillof el 36,42%. Gana por un punto, más el diferencial de otras fuerzas políticas.
Veamos el Caso Hurlingham
Este es llamativo y más simple. En 2015, Vidal sacó el 35,13% de los votos. Y Aníbal Fernández el 35,13%. Esto significa que ahora, a través del Frente Todos del que participa Unidad Ciudadana, más el PJ, más el Frente Renovador, Axel Kicillof le va a sacar una diferencia de al menos diez puntos en el distrito que gobierno Juan Zabaleta.
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