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(por Andrés Llinares).- El sábado 20 de agosto de 2016 a las 21:00 falleció Isabel García (80), amiga de este medio como lo es también su pareja y esposo de toda la vida Juan José Pisano, al que todos conocemos como Juancho.

Isabel y Juancho estaban casados desde hacía 55 años.

Y te vamos a extrañar, Isabel. Por tu cercanía, por el compromiso cuando tu marido hacía política siempre en los momentos más díficiles, por tu interés por la cultura, por respaldar tantas actividades sociales en Morón.

Y te vamos a extrañar por tu temperamento estricto pero plácido para transmitir cada palabra y en cada palabra un hecho.

Y te vamos a extrañar porque cuando una mujer como vos nos deja, no queda un agujero, se reconfigura todo el paisaje humano que uno lleva en la memoria.

Y te vamos a extrañar porque junto a tu marido existe toda una generación que se hizo adulta en los valores de la humildad, del diálogo, de la austeridad y la sencillez.

Te vamos extrañar, Isabel. Pero como le dije a mi viejo: nos vemos pronto. Un beso enorme. Y con todo el sentimiento un abrazo indecible a Juancho.

Isabel, no estás ni estarás sola, ni tampoco vos, Juancho. Nadie se rinde por una pérdida, la llora y la recuerda como se merece.

Por eso, para vos, que te gustaba y te seguirá gustando la poesía, descansá en paz porque nadie va a abandonar ni a rendirse de todo lo que nos enseñante junto a tu marido. Fuerza a tus hijos.

Isabel descansá en paz porque no nos vamos a rendir. Vamos a seguir siendo gente sencilla, humilde y, sobre todo, sabremos siempre que existe el otro.

Como Mario Benedetti en No te Rindas, nos hubieras dicho de ver junta a toda nuestra generación:

No te rindas que la vida es eso,

continuar el viaje,

perseguir tus sueños,

destrabar el tiempo,

correr los escombros y destapar el cielo.

No te rindas, por favor no cedas,

aunque el frío queme,

aunque el miedo muerda,

aunque el sol se esconda y se calle el viento,

aun hay fuego en tu alma,

aun hay vida en tus sueños,

porque la vida es tuya y tuyo también el deseo,

porque lo has querido y porque te quiero.

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